Viernes, 29 de Marzo del 2024
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Vigilancia las 24 Horas a los Cerros de Bogota

Publicado el 23/06/16

El alcalde Enrique Peñalosa; el director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), Néstor Franco, y el alcalde local de Chapinero, Fernando Quintero, entre otros funcionarios, regresaron este miércoles al sector del Bagazal, en Rosales (norte de la ciudad) donde ya habían sellado cinco predios por afectación a la reserva forestal de los cerros orientales, para anunciar las medidas que tomarán frente a este caso.

Entre estas está la posible demolición de las cinco edificaciones –El Arrayán, El Bambú, El Pachue, El Tuno y El Monteodoro– y el desarrollo del programa de vigilancia aérea para evitar nuevas obras ilegales en los bordes de la ciudad.

En relación con la destrucción de las edificaciones, el director de la CAR, Néstor Franco, aseguró que el próximo trimestre se darían las primeras sanciones, las cuales podrían ser “multas pecuniarias, posible demolición y restauración de los predios afectados”.

Los costos de los derribos y las actividades para resarcir los daños ambientales tendrán que asumirlos los propietarios de los predios. “Las demoliciones las podemos hacer nosotros pero le pasamos la cuenta a los propietarios”, puntualizó el director de la CAR.

Ante estas declaraciones, el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, mencionó que “estas construcciones son un símbolo del irrespeto de algunos poderosos por el medioambiente. De manera que estamos solicitando a la CAR que avance en la destrucción de estas edificaciones”.

Según el Alcalde si no se demuelen es más probable que reincidan en las construcciones. “Aquí no hay licencias, estas son edificaciones ilegales de estrato ‘ocho’, pero en esta administración vamos a proteger nuestros cerros como algo sagrado”, dijo el mandatario.

Peñalosa también anunció el programa de vigilancia área, que incluirá sobrevuelos por todos los bordes de la ciudad una vez al mes. “Durante los sobrevuelos se hará un registro fotográfico para denunciar el desarrollo de nuevas obras ilegales”, dijo.

Estas cinco construcciones, que se iniciaron en 2014 y están avaluadas cada una entre 5.000 y 30.000 millones de pesos, desataron la indignación de los ambientalistas desde marzo del 2015, cuando vecinos y la Asociación Amigos de la Montaña alertaron a la Alcaldía de Chapinero sobre estas construcciones.

El alcalde de Chapinero, Fernando Quintero, reiteró que “no pueden continuar con estas obras ni en el interior ni el la fachadas”, ya que en días anteriores observó obreros, al parecer en labores de jardinería. También habrían puesto cortinas en los apartamentos para continuar con las obras sin que las autoridades se dieran cuenta.

Aunque el alcalde local puso los sellos el pasado 8 de mayo, estos fueron retirados por desconocidos durante los últimos días. Dicha maniobra ya fue denunciada ante la Fiscalía. Por ello, las autoridades distritales volvieron a sellar estos predios.

Según Peñalosa, las localidades más afectadas por desarrollos ilegales que afectan los cerros de Bogotá son Ciudad Bolívar, Usme, San Cristóbal y Rafael Uribe Uribe, pero expresó que son situaciones muy distintas, ya que “una cosa son esas viviendas hechas por personas que acosadas por la necesidad invaden zonas naturales, y otra cosa, que es más grave, son las construcciones de estrato ‘ocho’ en los cerros”.

En lo corrido del año, según reveló el Alcalde, el Distrito ha sellado vertimientos de 17 empresas e instituciones educativas por contaminar humedales. También se han cerrado seis estaciones de gasolina que venían contaminando el suelo bogotano y 11 hornos de diferentes empresas por contaminar el aire.

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