Cerca de 12 mil hombres y mujeres de las Fuerzas Militares y la Policía Nacional, marcharán éste 20 de julio por la avenida 68, entre las calles 26 y 80 de la ciudad de Bogotá, en el tradicional desfile de conmemoración del grito de independencia.
En ésta oportunidad, la celebración de los 203 años de independencia rinde un homenaje especial a los veteranos que participaron en el conflicto bélico con Perú, en 1932, en la guerra de Corea en 1950, en el canal del Suez y la Península del Sinaí.
El desfile militar que comenzará a las 11 de la mañana, estará encabezado por el Comandante de la Quinta División, unidad operativa mayor que tiene como responsabilidad la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos que viven en 4 departamentos del centro del país.
Posteriormente marcharán los bloques de los héroes de la patria heridos en actos del servicio, el bloque histórico, las Escuelas de formación de las diferentes fuerzas, armas y especialidades, así como sus agrupaciones y equipos especiales.
Así mismo, la Fuerza Aérea realizará una demostración de poder aéreo en una imponente demostración conjunta donde participarán 117 aeronaves de ala fija y rotatoria, que surcarán los cielos de la capital colombiana.
La Armada Nacional también estará presente con más de 2.000 hombres y mujeres. El dispositivo militar estará integrado por personal de la Escuela Naval de Cadetes ‘Almirante Padilla’, la Escuela Naval de Suboficiales ‘ARC Barranquilla’, la Escuela de Formación de Infantería de Marina, Fuerzas Especiales Navales, Aviación Naval y del Cuerpo de Guardacostas.
Esa fuerza también presentará una muestra del Componente Fluvial, la Fuerza Expedicionaria de Paz y atención de desastres, más de 90 vehículos tácticos terrestres del Batallón de movilidad de Infantería de Marina No.1, cuatro botes de guardacostas, una escuadrilla de helicópteros navales y dos aeronaves tipo Patrullero Marítimo Casa CN-235.
Como es tradición desde 1964, cuando llegaron las gaitas a la Armada Nacional, 10 cadetes gaiteros desfilarán haciendo gala de sus toques armoniosos, pulcritud y marcialidad, manteniendo la práctica marinera conocida desde tiempos remotos en la Armada Inglesa, en la cual se tocaban las gaitas cuando los marineros entraban en batalla