Veinte minutos antes de este diálogo, el Kronos Quartet concluía el ensayo del día: una pieza del músico electrónico brasileño Amon Tobin.
Violines, viola y chelo, dispuestos a desmenuzar bits y secuencias. Un viaje experimental en el que Mozart no estuvo presente. Al terminar, John Sherba, Hank Dutt, Sunny Yang y David Harrington apuntaron los arcos al cielo y se miraron satisfechos.
“Deberías escucharlo, es verdaderamente increíble lo que hemos logrado”, describe Harrington lo que acaba de ver del cuarteto estadounidense en la sala contigua, y adelanta: “Verán al Kronos en un gran momento”.
Harrington es el líder del cuarteto de cuerdas más ambicioso y prolífico de los últimos 40 años, que ha viajado desde la música clásica hasta el rock, pasando por el jazz pero, sobre todo, dando vida a la música contemporánea de vanguardia, desligada de lo comercial y que lleva la mente de sus oyentes a nuevos estados.
El Kronos Quartet estará en Colombia entre el 10 y el 15 de septiembre para ofrecer cinco recitales en Bogotá con programas diferentes. Como está planteado, si usted es un fanático del cuarteto, debería asistir al menos a cuatro para empaparse de sus aventuras sonoras.
“Cada pieza nueva es un reto. En cada proceso nos preguntamos: ‘¿Seremos capaces de lograrlo? ¿Tenemos la imaginación, las agallas, todo lo que requiere una nueva pieza?’ A veces, las cortas pueden verse pequeñas, pero tenemos que usar todo lo que tenemos”, cuenta el músico.
Pese a lo experimental, el Kronos ha logrado popularizarse y ser una referencia mundial y masiva, algo inesperado. Parte de ello está en deshacerse de posturas intelectuales inmutables para poner sus cuerdas al servicio de artistas como Tom Waits, Café Tacuba (para su álbum Revés / Yo soy’), Laurie Anderson, el mismo Tobin y Dave Matthews Band.
“Lo que pone todo en su lugar es que cada cosa que ha hecho y hace Kronos Quartet es porque algo nos ha magnetizado (…). El hecho de que podemos ser inspirados, y de encontrar la oportunidad de hacer música junto a alguien como Asha Boshle (figura de la música india y referencia de Bollywood), es una de las experiencias más maravillosas de mi vida artística”.
Dos cintas de Darren Aronofsky llevan su música: The Fountain (2006) y otra más popular, Réquiem por un sueño (2000), en la que tejieron con Clint Mansell una atmósfera única que abrazó las oscuras tragedias protagonizadas por Jared Leto, Ellen Burstyn, Jennifer Connelly y Marlon Wayans.
“La idea de ver esta película era espeluznante. Todo es alrededor de la adicción a las drogas más fuertes –cuenta Harrington–. Nunca olvidaré la primera vez que vi todo esto, estaba temblando, pero lo hermoso detrás era la forma en que la música de Mansell empuja reacciones, está tan integrada a la película. Nos invitaron y nos resultó totalmente natural”.
Ya son casi 40 años de demencia. La primera pieza escrita para el grupo se dio en 1974, por uno de los profesores de composición de Harrington: “En esa primera versión, Kronos tenía elementos del folk estadounidense, el jazz y las canciones populares –explica el músico–. Desde el comienzo de nuestro trabajo, queríamos traer el mundo de la música que conocíamos a nuestros conciertos. Lo sorprendente es que funcionó y está vivo”.
En constante movimiento
Las energías internas de un cuarteto son intensas, como un plano cartesiano con fuerzas que se mueven en 4 direcciones y deben encontrar un balance. Esa química cautivó a los guionistas Seth Grossman y Yaron Ziberman para escribir la película A Late Quartet, que protagonizaron en 2012 los actores Phillip Seymour Hoffman y Christopher Walken, y que retrata el otoño creativo, cuando el balance se quiebra por la lucha de egos y el ocaso del talento.
Una historia con sabores propios vive el Kronos, que ha renovado algunos miembros. Desde hace unos meses cuentan con Yang, en el chelo, que reemplazó a Jeffrey Zeigler. “Algo hermoso en Kronos hoy es que John, Hank y yo estamos oyendo las piezas de una forma distinta, aunque las conozcamos hace muchos años. Tomamos ventaja de esta nueva situación para refrescar nuestro grupo. Lo escucharán”, adelanta. “Cuando estemos en Bogotá abriremos como siempre nuestro espectro de la música, eso es lo que más nos satisface (…). Espero conocer las mentes más creativas de la música en Colombia, los poetas y los actores y los activistas ¡y los científicos!”.
¿Dónde y cuándo?
– 10 de septiembre. Biblioteca Luis Ángel Arango (BLAA), piezas de Bryce Desnner, Missy Mazzoli y Ram Narayan, entre otros.
– 11, BLAA: Steve Reich, Terry Riley y Valentin Silvestrov.
– 13, Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, junto con la Filarmónica de Bogotá.
– 14, Teatro Jorge Eliécer Gaitán.
– 15, Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo: Penderecki, John Oswald, Alter Yechiel, Clint Mansell, John Zorn y Café Tacuba, entre otros.
Informacion www.bogota.vive.in