Sábado, 27 de Abril del 2024 
Caracas, Venezuela
AFP
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, señaló que no descarta impulsar “acciones radicales” contra el Parlamento y dirigentes opositores en su nuevo gobierno que comienza a regir hoy en medio de cuestionamientos sobre la legitimidad de su reelección presidencial.
El jefe de Estado indicó que el Ejecutivo apoyaría incluso la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), órgano integrado solo por oficialistas, de disolver la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) y convocar a una nueva elección para renovar este poder controlado por el antichavismo.
Disolución
Denunció que la Cámara está “conspirando” contra la revolución bolivariana, pero aseguró que derrotará “todos los complots y planes conspirativos” que prepara, señaló, Estados Unidos junto con gobiernos de la región para derrocarlo.
En este sentido, advirtió a los países del Grupo de Lima que recurrirá a “las más urgentes y crudas medidas diplomáticas” si no rectifican su última declaración en la que 13 de los 14 miembros de este grupo instan al líder chavista a no tomar posesión por “ilegítimo” y transferir el poder al Legislativo.
Maduro tomará posesión como presidente reelegido luego de ganar los controvertidos comicios de mayo pasado, a los que no se presentó el grueso de la oposición por considerarlos fraudulentos y estar inhabilitados o presos sus principales líderes.
Bajo esta premisa, el opositor Frente Amplio Venezuela Libre (FAVL) convocó a manifestaciones ciudadanas como muestra de rechazo a la jura.
Hiperinflación
Por otro lado, Venezuela cerró el 2018 con una inflación de 1’698,844.2%, una cifra que confirma la grave crisis y la espiral hiperinflacionaria en la que entró el país caribeño hace más de un año, según informó la Asamblea Nacional, que controla el antichavismo.
Así, lo que el 1° de enero de 2018 costaba 1 bolívar, hoy cuesta 17,000 bolívares.
El Parlamento, que ofrece los datos en vista de que el Banco Central lleva cerca de 3 años sin hacerlo, había informado el año pasado que el país cerró con una inflación de 2,616% durante el 2017.
Un régimen de facto
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) fijó su posición frente al nuevo período de seis años que jurará Nicolás Maduro, y señaló que esta pretensión es “ilegítima por su origen”.
“La pretensión de iniciar un nuevo período presidencial el 10 de enero del 2019 es ilegítima por su origen, y abre una puerta al desconocimiento del Gobierno porque carece de sustento democrático en la justicia y en el derecho”, señaló la exhortación de los obispos.
La Iglesia católica venezolana señaló que el país vive “un régimen de facto, sin respeto a las garantías previstas en la Constitución y en los más altos principios de dignidad del pueblo”.
El texto recalca, además, que la Asamblea Nacional (Parlamento) “es el único órgano del poder público con legitimidad para ejercer soberanamente sus competencias”.
El monseñor Baltazar Porras señaló que no corresponde a la Iglesia “reconocer o no reconocer, pero que sí está claro que no están dadas las condiciones” para decir que en Venezuela existe “un régimen democrático”.
Indicó que tampoco les compete apoyar, o no, las protestas.
