Lunes, 20 de Mayo del 2024 
Durante la segunda jornada de reconocimiento de responsabilidad de los comparecientes procesados por falsos positivos, organizada por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), en Santander, el sargento retirado del Ejército, Sandro Mauricio Pérez, tomó la palabra y reveló cómo ocurrieron los hechos.
“Estoy aquí frente a ustedes para aceptar mi responsabilidad a título de coautor de crímenes de guerra en persona protegida”, fueron las palabras con las que Pérez comenzó su intervención.
El exmilitar expresó que se convirtió en un asesino, que lo convirtió en un monstruo para la sociedad.
“Me convertí en un asesino, mi falta de temor a Dios, mi falta de amor y respeto por la vida humana por la dignidad humana, me llevó a terminar en eso. Un monstruo para la sociedad”,
Pérez relató que en vista que no obtener operacionales, realizó una oferta criminal para traer jóvenes que vivían en Bogotá y para eso contactó a otras personas que conocía en Soacha.
“Con mi responsabilidad planeé cómo llegaba cada uno de estos jóvenes a la ciudad de Ocaña y cómo se deberían comprar los pasajes para que ellos llegaran hasta acá. Planeé y entregué armas para que jóvenes inocentes con sueños que eran amados por sus madres fueran entregados como asesinados y deportados como muertos en combate, como un resultado operacional. Fueron asesinatos a sangre fría”, relató el exmilitar
De acuerdo con el testimonio del exmilitar, los jóvenes fueron llevados al Norte de Santader mediante engaños y con la idea de que se vida iba a mejorar. Una vez llegaban, Pérez reveló, que les quitaba los documentos para reportarlos como N.N. para que fuera difícil que sus familiares los encontraran.
“En mi formación, en la doctrina militar, nunca mencionaron hacerle daño a la población civil, pero quiero decirles que escuché que un patrón criminal con una palabra que en nuestro trabajo como militares escuchamos, algunos: legalizar. No entendí al comienzo, me quedaba la duda qué era eso. En realidad, hacían referencia a elementos que usaban diariamente”, sostuvo Pérez
En el transcurso de la tarde seguirán más intervenciones, entre ellas la del general (r) Paulino Coronado, comandante entre 2006 y 2008 de la Brigada 30, que operaba en Norte de Santander.
Fuente: El Nuevo Siglo.
