Lima, 29 de abril de 2025.- Hace más de 145 años, el mundo cambió cuando Thomas Alva Edison subió por primera vez una bombilla de filamento de carbono, la cual permaneció iluminada durante más de 40 horas. Ese pequeño objeto resistió el paso del tiempo y marcó el inicio de una transformación histórica. La llegada de la luz eléctrica revolucionó la vida cotidiana y pasó de ser un lujo a convertirse en una necesidad básica para el desarrollo de las ciudades, el trabajo y el bienestar general.
Aunque se suele asociar la invención de la bombilla eléctrica a Thomas Alva Edison, la historia es más compleja. Desde principios del siglo XIX, distintos inventores habían experimentado con otras formas de iluminación de este tipo. Sin embargo, las primeras bombillas eran frágiles, costosas y apenas podían mantenerse encendidas por unos minutos.
Edison, en cambio, logró perfeccionarla al punto de hacerla funcional para el uso masivo. En 1879, desarrolló un filamento de carbono dentro de un bulbo al vacío que permitía una emisión de luz constante durante más de 14 horas.
¿Cómo la bombilla cambió nuestro estilo de vida?
El impacto de la bombilla eléctrica continúa presentándose en diversos aspectos de la cotidianidad:
Con el paso del tiempo, la bombilla eléctrica evolucionó. Actualmente, se utiliza tecnología más eficiente, como las luces LED que consumen hasta un 80% menos de energía. Sin embargo, el principio se mantiene: transformar energía en luz, y con ella, transformar la vida.
El poder de los soñadores
El camino de Edison y quienes lo precedieron no fue sencillo. Más de mil prototipos fallaron antes de encontrar la fórmula correcta. No obstante, su perseverancia subió algo más que una bombilla: subió la posibilidad de imaginar y construir un futuro diferente.
Ese mismo espíritu es el que inspira la campaña “Soñadores que transforman” de Colbún y Fenix , una iniciativa que rinde homenaje a figuras históricas como Edison, Marie Curie, Nikola Tesla y Albert Einstein, quienes desafiaron los límites de su tiempo para cambiar el mundo.
“La transición energética nos llama a desafiarnos todos los días, a hacer las cosas mejor, a innovar. Somos una industria importante en la vida de las personas y de las empresas. Este es el gran mensaje de la campaña, tenemos que seguir soñando para transformar” , comenta José Ignacio Escobar, CEO de Colbún. Así como la bombilla transformó el mundo hace más de un siglo, la compañía apuesta por tecnologías renovables y soluciones que impulsan el progreso y acompañan los sueños de quienes miran hacia el futuro. Porque la energía no solo enciende focos, también mueve a quienes creen en lo que aún no existe y trabajan para hacerlo realidad.