Lima, 17 de Octubre del 2025._ La idea de que un traumatismo en la mama podría provocar cáncer ha circulado desde hace décadas. Sin embargo, los estudios clínicos y la literatura médica no respaldan tal asociación. Cuando ocurre un golpe fuerte, lo que suele provocar es un hematoma (acumulación de sangre) o una “necrosis grasa” (inflamación no infecciosa del tejido mamario), procesos benignos que pueden dejar una cicatriz o endurecimiento local y, en ocasiones, generar confusión en las imágenes diagnósticas.
Al respecto, el Dr. Mauricio León Rivera, director de la Liga Contra el Cáncer, presidente de la Sociedad Peruana de Oncología Quirúrgica y jefe del Servicio de Mastología de la Clínica Ricardo Palma enfatiza que el hallazgo de un “tumor” tras un golpe en las mamas muchas veces ocurre por coincidencia temporal, la lesión podría haber hecho que la mujer revise la zona con mayor atención, detectando algo que previamente ya estaba presente y creciendo.
Además, el golpe no induce alteraciones (conocidas como “mutaciones”) en el ADN de las células mamarias, que es el mecanismo que sí causa el cáncer. Lo importante, es estar alerta ante cualquier cambio o masa que se detecte después de un golpe y que siempre debe ser evaluado por un médico especialista en mastología para descartar otras patologías.
Indicó que los verdaderos factores de riesgo de esta enfermedad están relacionados con aspectos genéticos, hormonales y de estilo de vida. Entre ellos, menciona los antecedentes familiares de cáncer de mama, las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2, la edad avanzada, la exposición prolongada a estrógenos, la obesidad, el sedentarismo y el consumo excesivo de alcohol.
Incluso factores reproductivos como el no haber tenido hijos o tener el primer embarazo después de los 35 años también incrementan el riesgo de cáncer mamario. “Mientras más temprano se detecte el cáncer, mayores son las probabilidades de curación. En etapas iniciales, los tratamientos son menos agresivos y las tasas de supervivencia superan el 95 %”, afirma el oncólogo.
El Dr. León Rivera hace un llamado a todas las mujeres a realizarse un chequeo médico anual que incluya examen clínico de mama y estudios de imagen —mamografía o ecografía— según la edad y los antecedentes familiares. “El diagnóstico precoz marca la diferencia entre la vida y la muerte. Las mujeres deben conocer su cuerpo, realizar auto exploraciones una vez al mes y acudir al médico ante cualquier cambio, por pequeño que parezca”, destacó. La detección temprana sigue siendo la herramienta más poderosa en la lucha contra esta enfermedad.
Finalmente, el 19 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Lucha Contra el Cáncer de Mama, una fecha que busca crear conciencia sobre la importancia de la prevención, la detección oportuna y el acceso a tratamientos adecuados. Este día representa una oportunidad para recordar que la batalla contra el cáncer de mama se gana con información, educación y responsabilidad en el cuidado de la salud. Cada chequeo, cada autoexamen y cada conversación sobre el tema puede salvar una vida.
