Lo había intentado una, dos, tres veces, este domingo en El Campín. Parecía que Omar Pérez volvía a salir en blanco, pero en otro paciente intento liberó ese grito contenido de gol. Solo tuvo que acariciar la pelota, a un centro de Otálvaro. El arco estaba desprotegido, sin guardián. Y el volante, que buscaba su […]