Lunes, 20 de Mayo del 2024
xb-prime


Homenaje al actor Álvaro Rodriguéz en la FUGA, presentación de obra de teatro y conversatorio

Publicado el 27/07/23

Bogotá 27 de julio de 2023. Con el actor y director Álvaro Rodríguez regresa la franja Saberes Mayores a la FUGA (Fundacion Gilberto Alzate Avendaño). Este sábado 29 de julio a las 3:00 p.m. Se presentará gratuitamente la obra de teatro ‘La soledad de los nadies’, dirigida por él y creada con su grupo Teatro Estudio Alcaraván.

 Los asistentes podrán disfrutar de una pieza en la que se abordarán temáticas como la independencia, la identidad, la frustración y la dignidad humana a través de personajes condenados a la soledad. Después de la obra de teatro, Álvaro estará conversando sobre su vida en la actuación y su trayectoria en el teatro, el cine y la televisión con Felipe Aljure, director de cine y de la película “La gente de la universal”, de la cual el actor fue protagonista.

“Saberes Mayores: la experiencia en El Muelle es una franja con enfoque poblacional y etario que incluye propuestas de personas mayores que son artistas de danza, música y teatro. Nuestra intención es visibilizar y reconocer su aporte en la vida cultural de la ciudad, pero, sobre todo, propiciar espacios de encuentro para personas mayores en ejercicio de sus derechos culturales” explica Margarita Díaz directora de la FUGA.

Álvaro Rodríguez es un actor colombiano con más de 30 años de experiencia en cine, teatro y televisión. Egresado de la Escuela Nacional de Arte Dramático, ha sido actor de planta durante más de 24 años con el Teatro La Candelaria dirigido por Santiago García.

Allí participó en montajes como: Guadalupe Años Sin Cuenta, La Trifulca, Nosotros Los Comunes, La Historia del Soldado, El Diálogo del Rebusque, En La Raya, El Paso, Maravilla Estar, entre otras. Fue director del Callejón del Gato y desde hace 21 años dirige Teatro Estudio Alcaraván, con el grupo han creado montajes como: A – Trazos, En Canto Absurdo, La Brújula, Contrafaz, Ana, El Mago y El Aprendiz, Las Peregrinas, La Soledad de Los Nadies, La Caída de las Águilas y Encierro.

Ha actuado en más de 50 largometrajes y producciones cinematográficas: Amar y Vivir (Carlos Duplat, 1990), La Gente de La Universal (Felipe Aljure 1991), Golpe de Estadio (Sergio Cabrera 1998), Soplo de vida (Luis Ospina 1999), Soñar no Cuesta

Nada (Rodrigo Triana 2005), Perro Come Perro (2008) y Todos Tus Muertos (2011) de Carlos Moreno. Entre otros.

Ganador del premio a mejor actor en el II Festival latinoamericano de cine de New England (1994, EEUU) Premio a Mejor Actor en el festival Latinoamericano de cine de New York en 1996, Premio a Mejor Actor protagónico en los Premios Macondo 2012.

Es el director general de CASA TEA, sede de Teatro Estudio Alcaraván, liderando procesos de formación, de creación y gestión, actividades primordiales del grupo.

La siguiente es una entrevista hecha al maestro con motivo de su invitación a esta franja.

¿Cómo siente esta invitación de la FUGA al espacio de Saberes Mayores?

“Yo me siento muy honrado y agradecido, sobre todo porque estoy inmerso en la creación colectiva, mi existencia teatral tiene que ver con actores, con los grupos y con el Teatro Estudio Alcaraván que son los que permiten desarrollar esta manera de afrontar el teatro como invento que es la esencia del arte.”

Maestro, cuéntenos un poco sobre lo que es la creación colectiva. 

“La creación colectiva que como su nombre lo indica, pues colectivamente se inventa desde un comienzo, desde una motivación X. Por ejemplo, con la nueva obra que estamos trabajando, nace de improvisaciones muy libres para ver qué pasaba, siempre trata uno de ubicarse en las temáticas del momento y paradójicamente empezó a surgir el problema ambiental y empezó a coger camino. Me complace que la creación siempre ha estado motivada por los instantes importantes del ser humano y de los contextos sociales. No es un problema ambiental en Colombia sino en el mundo. Eso me ha parecido muy grato, lo que me hace contento, feliz porque además de estar disfrutando del placer de actuar y crear en el espacio escénico, está ayudando a entender las causas de todo este despelote ambiental en que vive el mundo contemporáneo. Me pone en una actitud que me exige el hecho creativo y tratar de humanizar este país y el mundo que está tan caóticamente expuesto a los cambios climáticos. Me pone contenta el alma saber que el espacio del arte y la cultura es fundamental para lo que está sucediendo, si el país no mira el arte y la cultura con respecto a la crisis en que se encuentra es muy difícil humanizarnos para ver qué camino podemos encontrar en este universo tan incierto”

¿Cuáles han sido los grandes retos y hallazgos durante toda esta trayectoria haciendo creación colectiva?

“Siempre he dicho que haber conocido a Santiago Garcia ha sido la justificación de mi existencia y el colectivo del teatro La Candelaria. Me tocó la etapa más grata ingeniosamente hablando de descubrir lo poético de ese espacio creativo. Ser partícipe de una obra como Guadalupe años cincuenta, considerada por el Ministerio de Cultura como la obra más emblemática del siglo XX, haber estado allí y ser partícipe de la historia y la histeria de este pais (risas) sin tener que sentir abocado a aprender los capachos y conocer el universo de la música llanera porque la música y el arte en general habla también de sus contextos. Una especie de determinismo geográfico y los llanos está plagada de historia desde la Independencia, las luchas de la historia de Bipartidista y la esencia de Guadalupe Salcedo. Y es un mito en el que se vislumbran y se pueden ver todas las características culturales de los llanos orientales en su arte y en su dignidad por la pelea de su espacio y su naturaleza.”

En la creación colectiva entra cualquiera, ¿por qué es importante que la creación colectiva tenga este enfoque?

“El mismo oficio me ha enseñado a escudriñar a los seres humanos para descubrir a los personajes y la dramaturgia, y lo que uno se entera es que el arte y la poesía es inmersa e inherente al ser humano. Osea sin el ser humano no existe el arte, la danza, la pintura; es eso, el teatro con su creación colectiva y su enseñanza tan majestuosa de Santiago Garcia en cuanto a que decía que tocaba entrar sin el conocimiento absoluto de nada sino de descubrir e inventar. Ahí uno se da cuenta que todo el mundo tiene algo que aportar, toda persona tiene una noción de algo, una virtud, una potencialidad, una capacidad para descubrir el camino de lo ético de la existencia. Entonces en los ejercicios teatrales, en los diálogos de formación, lo que se hace es incentivar para que todo el mundo descubra lo que tiene guardado, toda persona tiene un guardado, entonces es muy interesante porque la persona no sabe. El capitalismo clasifica demasiado, los intelectuales por allá, los artistas por el otro lado.

Todo persona tiene su artista y su poeta sentado en el corazón, todo el mundo canta, baila, maneja la palabra, maneja la estética pictórica como en el espejo que color o textura me pongo, eso está tácito en los seres humanos. Y lo que pasa es que nosotros nos dedicamos a esto pero por eso cada espectador tiene la posibilidad de leerlo a su manera, de acuerdo a sus gustos y su historia cultural, a su conocimiento, sensibilidad, psicología, ahí entra todo.

Cuando voy a las universidades, cooperativas, sindicatos y al poner a las personas en el juego teatral, uno se da cuenta que inclusive la gente hace teatro en la casa todos los días: esta el más chistoso, el más tímido, el más bailarín, el más dicharachero. Entonces toda esa vaina se va descubriendo y se descubre inclusive talentos muy guardados que no se por que nunca han salido pero al entrar en los juegos teatrales, en la lúdica, que es una cosa que tenemos que recuperar “ese juego del niño”, el teatro nos exige recuperar eso, sino reimos y le mamagos gallo a la vida, sino no tenemos como mínimo una carcajada al dia estamos perdidos.  La risa es el remedio infalible, el entretenimiento, la búsqueda de la felicidad, uno nace con esa búsqueda de la felicidad y muere en esa búsqueda, lo mismo es el teatro.

Todo el mundo tiene eso, sino como artista uno se tiene que dedicar, con esas experiencias se da cuenta que las personas aportan de las maneras más insólitas en torno a un vino o celebrando un ensayo las mismas improvisaciones y situaciones que empiezan a revelarse que se dan y dan pie a un proceso para hablar en torno a un vino. Así como una obra o una improvisación en cada ejercicio evoluciona el lenguaje, inconscientemente la gente va elucubrando y expresando cosas que a lo mejor nunca había hecho conciencia. Yo he hecho teatro con gente que nunca se había parado en un escenario, eso me parece muy importante, por eso la necesidad de que el Estado y los estamentos culturales apoyen el descubrir esa sensibilidad en todos y cada uno de los habitantes en la tierra”

Gracias por apoyar la cultura nacional. 



Comments are closed.